sábado, 20 de agosto de 2011

Entre la chamba, la lluvia, las novedades y la escurridiza inspiración

Hola, gente, ¿cómo han estado? Seguramente nadie esperaba que anduviera por aquí, no en estas fechas, no con cosas que para todos, menos para mí, son intrascendentes. Pero bueno, me gusta considerarme impredecible. Al menos en ciertas cosas.

Pues bien, soy una humilde contadora agobiada por tanto papel a capturar, lo admito. Cuando creo que ya acabé una tanda, me llega la siguiente. Sí, lo que me agobia es eso que llamamos "talacha", puro arrastrar el lápiz (lo que en esta era electrónica, equivale a teclear y teclear), esperando que nada se te escape. Como los pagos a los proveedores o que no se te pierdan las facturas (su servidora ya delira por el calor de Aguas, pasará al siguiente tema...).

Llueve en mi ciudad. Cuando quiere, claro. Hace menos de cinco minutos cayó una de esas lluvias repentinas que no duran nada. Mi madre (anteriormente mencionada en cierta entrada de marzo y apodada La Doña) fue a meter su jaula con una pareja de preciosos canarios y ¡zaz!, dejó de llover. Lo juro, el clima es un berrinchudo que no quiere complacernos.

Novedades: por primera vez en muchísimo tiempo, tengo capítulos de la Saga HHP en espera. ¿Eso qué significa? Fácil: ya están terminados, solamente estoy espaciando su momento de publicación para no subirlos de un jalón. Tampoco son muchos, tres a lo sumo, pero eso me aligera la conciencia con eso de apenas poder escribir. Aprovecho para seguir un fic que tenía medio olvidado: Rilato. El pobrecito lleva pocos capítulos y quiero avanzarle poco a poco, porque tengo pensadas varias cosas que en otros fics no son aplicables... Como las semejanzas de la trama con dos de mis mangas favoritos por excelencia (y cómo no, son autoría de las grandiosas CLAMP): Tsubasa Reservoir Chronicles (que normalmente abrevio TRC) y xxxHOLiC.

Eso me lleva a hablar de la inspiración. ¡Oh, amiga voluble, caprichosa, inestable! Cuando la necesito, no aparece y cuando debo pensar en otra cosa (coftrabajocofquehacerescof) viene e invade mi mente. Se los juro, si fuera una persona real, sermonearía a mi inspiración un buen rato, no sin antes aclararle que la quiero con locura. Aunque espero que me ayude a imaginar qué le gustaría de regalo de cumpleaños a mi hermana (sí, la que se casó en abril, brincándome descaradamente, por cierto). A veces uso la inspiración para las cosas más raras. Será porque yo soy así de... inexplicable.

Definitivo, su servidora delira, así que mejor se va a aprovechar eso en un fic. Me despido. Cuídense mucho y nos leemos pronto.