miércoles, 6 de mayo de 2015

Describiendo a... (CXIV)

Título: Días de Sangre y Resplandor (en el idioma original, Days of Blood and Sparlight).

Autor: Laini Taylor.

Sinopsis: La estudiante de Arte y aprendiz de monstruos, Karou, tiene por fin las respuestas a las preguntas que se lleva haciendo desde niña: por fin sabe quién es y, sobre todo, qué es. Pero junto a esta verdad ha conocido otra mucho más dolorosa: el ser al que ama es su peor enemigo, responsable de la traición más terrible y del dolor de todo un mundo. [...] Mientras Karou y sus compañeros construyen un ejército quimérico en un mundo de polvo y estrellas, Akiva lleva a cabo otro tipo de batalla, la de su redención, la búsqueda de esperanza. Pero ¿puede la esperanza surgir de las cenizas de un sueño roto? (Extracto de la solapa de la portada de mi ejemplar).

Editorial de mi ejemplar: Editorial Santillana, S. A. de C. V. (a través de Alfaguara).

¿Qué les puedo decir? Esta es la segunda parte de la trilogía desarrollada por Taylor. Si les digo la verdad, su lectura me pescó en mal momento, pues entre más tiempo estoy en casa, menos me acerco a mis queridos libros y por lo tanto, leo más bien poco. Sin embargo, las salidas a entrevistas de trabajo sí que ayudaron, porque no hay nada como leer para pasar el tiempo en los autobuses. Pero creo que no les importan sucesos que han ocurrido casi medio año antes de la presente entrada, ¿verdad? (Bell suelta una risita).

Karou y Akiva, tras las revelaciones en Hija de Humo y Hueso, se han separado. Karou está del lado de las quimeras; Akiva, con el resto de los ángeles. Cada uno, a su manera, sufre las consecuencias de lo desencadenado por las miles de marcas de manos en puertas de todo el mundo humano, ¿pero están realmente a salvo de lo ocasionado por su compañía mutua? ¿Qué bando tiene razón en una guerra sin sentido? ¿Acaso hay un futuro distinto a un continuo derramamiento de sangre por ambas especies? ¿Quién es el bueno y quién el malo en esta historia?

Las anteriores preguntas se suman a situaciones que antes ni podían imaginarse: una nueva guerra, un pueblo desconocido, amigos de siempre que hacen el viaje de su vida y una maraña de planes, intrigas y mentiras que conduce a ciertos personajes a acciones que al principio creían buenas, pero acaban por torcerse en su contra más de lo que hubieran podido imaginar. 

En lo personal, por lo mencionado antes de que leí este libro lentamente, al principio no me conectaba demasiado con la trama o los personajes. Había algunos entrañables, desde luego, y algunos aspectos de la historia no dejaban de intrigarme. Sin embargo, debí pasar de la mitad del libro (aproximadamente, si me baso en la posición de mi separador) para enfrascarme cada vez más y descubrir, como en la primera parte, que tal vez aquí haya algunos clichés pero su presentación en turno los salva de ser olvidados sin más.

Y claro, como es costumbre en mí, he de seguir con la última entrega inmediatamente, Sueños de Dioses y Monstruos, porque el final de Días de Sangre y Resplandor es lo suficientemente tenso como para dejarlo así. Aunque claro, a la fecha de la publicación de la presente puede que mi trauma con Karou, Akiva, su mundo y sus circunstancias ya se haya apaciguado.

Cuídense mucho y nos leemos a la próxima.

(Leído en 2014)

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